La industria cultural es el conjunto de empresas e instituciones cuya principal actividad económica es la producción de cultura de forma masiva y en serie, fundamentada en la repetición constante de esquemas básicos que manifiestan una serie de situaciones y modelos irreales.
La expresión "industria cultural" fue empleada por primera vez por los teóricos de la Escuela de Frankfurt, que intentaba recoger así el cambio radical que se estaba produciendo tanto en la forma de producción como en el lugar social ocupado por la cultura.
La televisión tiende a una síntesis de radio y cine cuyo empobrecimiento de los materiales estético y de contenido son evidentes utiliza clichés, efectos y chistes como estructuras. La industria cultural se ha desarrollado con el efecto, los productos de la industria cultural constituyen un arquetipo de la colosal maquinaria económica.
Toda cultura de masas bajo un monopolio es idéntica, su poder se acentúa cuando se expresa abiertamente.
La industria de la cultura engloba todos los ámbitos que la sociedad persigue , la distracción y el entretenimiento con el propósito de eludir los procesos automáticos laborales.
Los estándares aparecen de las necesidades de los consumidores y fueron aceptados sin oposición. La racionalidad técnica es hoy la racionalidad del dominio, la técnica de la industria ha llevado a la estandarización y producción en serie sacrificando aquello por lo cual la lógica de la obra se diferenciaba de la lógica del sistema social.
La subordinación de la más poderosa compañía radiofónica de la industria eléctrica o la del cine respecto de los bancos, define el entero sector quienes se encuentran estrechamente liados entre sí.
La ordinaria industria cultural revela cómo se organiza, clasifica y persuade a los consumidores , siempre hay algo previsto para todos a fin de que nadie pueda evadir.
Los productos de masa que son fabricados para cada tipo y nivel de receptor o clase, todo esto mediante índices estadísticos los cuales son estudiados por investigaciones de mercado.
La televisión tiende a una síntesis de radio y cine cuyo empobrecimiento de los materiales estético y de contenido se evidencia.
La industria cultural se ha desarrollado con el efecto. Los productos de la industria cultural constituyen un arquetipo de la colosal maquinaria económica, las manifestaciones particulares de la industria cultural hace de los hombres aquello que dicha industria los ha convertido.
Los medios de comunicación son instrumentos de alineación cultural todopoderosos que tienden a desarrollar reacciones automatizadas y debilitan la fuerza de resistencia individual.
